Viridiana Morales

Sabemos que actualmente para lograr una mejor enseñanza y aprendizaje en los alumnos, es indispensable contar con las herramientas tecnológicas adecuadas para que tanto profesor como el estudiante se sientan cómodos y motivados al momento de utilizarlos, ya sea fuera o dentro de la institución. Es por esto que hoy día podemos encontrar un sin fin de herramientas tecnológicas, las cuales no solo favorecen al proceso de aprendizaje de los alumnos, sino también da la posibilidad a los profesores de poder controlar el aprendizaje en cada alumno y detectar a tiempo los problemas que surjan y corregir. Pero la capacidad de la tecnología no acaba ahí, esta siempre mejorara el aprendizaje personalizado e individualizado, siempre y cuando se integre a la perfección.

¿Cómo empezar a integrar la tecnología en el salón de clases?

Esto va a depender de los recursos tecnológicos con las que cuente la institución, pero sean cuales sean las herramientas, siempre será importante buscar la manera de motivar a sus alumnos al uso de las mismas, y como profesores explotarlas al máximo para así lograr obtener los objetivos que buscamos.

Una muy buena opción y sobre todo básica para empezar a apoyarnos en la tecnología, es realizar presentaciones interactivas de manera constante, ya sea para la introducción a un nuevo tema o para evaluar los conocimientos de cada estudiante al finalizar una lección. Es muy importante que con estas presen- taciones los estudiantes no solo necesiten ver la proyección, o a un punto fijo, sino que tengan la información compartida en sus dispositivos y que además les permita explorarla y navegar en ella; esto ayudará a que los alumnos no vean la clase como algo aburrido y convencional.

Para ello hay que asegurarnos que las herramientas o sistemas de formación en línea con las que cuenta nuestro salón de clases, nos brinden la opción de:

1. Poder compartir materiales (hojas de trabajo, guías de enseñanza y aprendizaje, libros virtuales, etc.).

2. Navegar a través del contenido de cada lección.

3. Administrar el contenido que queremos para los alumnos.

4. Asignar actividades a los alumnos, pero al mismo tiempo darles la opción de seguir avanzando y explorando de manera voluntaria.

5. Crear y reproducir vídeos conceptuales.

6. Trabajar con algunos interactivos, ilustraciones, imágenes, audios, etc.

7. Y al mismo tiempo, permitir a los estudiantes realizar pruebas y exámenes en línea desde sus smartphones, tabletas, ordenadores y otros dispositivos electrónicos.

Adicionalmente, es importante resaltar que el profesor siempre debe buscar la manera de interactuar, incentivar y motivar a sus alumnos.

Como ya hemos mencionado, la tecnología tiene la capacidad de transformar los métodos convencionales de enseñanza y aprendizaje, pero aquí los principales beneficiados con la adopción de la tecnología son los profesores. Esto debido a los muchos beneficios que les puede brindar la tecnología como; el poder calificar automáticamente los trabajos, autoevaluar y asignar tareas.

Y no se trata de que la tecnología suplante el trabajo de los profesores, se trata de utilizar la tecnología perfectamente para que los profesores simplifiquen su trabajo notablemente y mejoren la calidad de enseñanza.

Utilizar la tecnología en la educación es una excelente idea.Y sí, al igual que cualquier otro elemento, tiene ventajas y desventajas, pero siempre será más difícil avanzar y evolucionar si nos concentramos más en los inconvenientes, en lugar de beneficiarnos de las ventajas que la tecnología nos ofrece.

Si están empezando a adoptar la tecnología, lo recomendable es mantenerse siempre con una actitud positiva, divertida y hacer que los alumnos se la pasen bien en cada clase, porque solo así la experiencia con la tecnología será más gratificante y el aprendizaje más ameno y duradero.