Educación para el Futuro de los Alumnos: INNOVANDO MENTES: LO QUE LOS ALUMNOS NECESITAN PARA EL FUTURO
Marcus Conyers
"Todo a tu alrededor que llamas vida fue creado por personas que no eran más inteligentes que tú y tú puedes cambiarlo, puedes influenciarlo, puedes construir tus propias cosas que otras personas pueden usar” Steve Jobs; inventor 1955-2011)
“Estamos convencidos de que el mundo se dividirá cada vez más entre los países que tienen habilitada una alta imaginación, promueven y permiten la imaginación y extras de su gente y los países con baja imaginación habilitada, aquellos que reprimen o simplemente fracasan en desarrollar las capacidades creativas y habilidades para encender nuevas ideas, empezar nuevas industrias y aprovechar los extras propias de su gente. ” Thomas Friedman y Michael Mandelbaum; That used to be Us (2011).
El presente y el futuro que se visualizan con estas dos citas son tanto un reto como una oportunidad. Las palabras de Steve Jobs en especial, capturan la esencia de la mentalidad que los alumnos requerirán para el futuro a medida que tomen su lugar en un mundo en el que la automatización y el outsourcing* del trabajo rutinario están transformando el entorno y sus prospectos de carrera. He tenido el gran privilegio de enseñar estrategias cognitivas que apoyan el pensamiento creativo de los alumnos desde kínder hasta la universidad. He sido inspirado por su increíble potencial para aprender, innovar y para resolver problemas.
Recuerdo una clase un día específico en el que estaba compartiendo una estrategia para promover la colaboración creativa que llamo “story scape”**. Los alumnos provenían en su mayoría de familias con bajos ingresos, hijos de agricultores migrantes, con un limitado dominio del inglés y de conocimientos de antecedentes. Estaban alertas, animados, rebosantes de potencial y era un placer trabajar con ellos. Aunque carecían de confianza en sus habilidades para escribir una historia. Con la estrategia “story scape”, actúo una historia basada en la aportación creativa de todos los alumnos. Generalmente las historias terminan con mi personaje en grave peligro. Mi meta es asegurarme de que aun el alumno más tímido contribuya y que todos experimenten la emoción del éxito alimentado por la liberación de dopamina de sus cerebros por esta experiencia positiva y energizante.
Empezamos con la invitación a terminar una oración de apertura, “Había una vez un hombre que estaba usando…?”
“Un traje de Elvis Pressley,” sugirió nuestro primer contribuyente.
“Y estaba buscando una…?”
“Guitarra,” saltó un aprendedor anteriormente reacio que ahora corría el riesgo de no ser uno de los más populares de la clase pues su amigo que había hecho la primera sugerencia se había convertido en el centro de atención.
“Y luego oyó un sonido espantoso atrás, empezó a correr porque lo estaba persiguiendo un…?”
“¡Un sapo gigante!” exclamó otro alumno.
“¡Un sapo morado gigante!” aportó otro.
Mientras actuaba la parte de un hombre vestido como Elvis, buscando una guitarra mientras lo persigue un sapo morado gigante, les pregunté a los alumnos, “¿Qué pasa después?”
“¡Se tropieza con la guitarra y el sapo lo va a agarrar!” Esta sugerencia es recibida con carcajadas de los alumnos encantados.
“OK, ¿ahora de qué manera creativa podemos resolver su problema? Pregunté.
El salón quedó en silencio, mientras cada cerebro se esforzaba por encontrar una solución innovadora a este dilema. Algunos alumnos se veían pensativos, otros un poco angustiados, casi podía verlos actuando varios escenarios en sus mentes (¡que es en sí una estrategia para facilitar el pensamiento creativo!).
En una voz muy baja, una niña tímida que aún no había hablado dijo, “El hombre Elvis recoge su guitarra y le canta una canción de cuna al sapo morado gigante, así que se duerme.”
Wow.
Estaba anonadado por lo perfecta que parecía esta solución y también lo estaba su profesora y sus compañeros. Nuestro silencio fue roto por un gran aplauso espontaneo. Luego los alumnos se pusieron a escribir su propia versión de la historia, agregando detalles a los personajes, la trama, el problema y la resolución.
Esta experiencia captura en gran medida lo que ha alimentado mi pasión por desarrollar estrategias que cultiven las habilidades cognitivas que sustenten el pensamiento innovador y las actividades emprendedoras que capaciten a cada niño a desarrollar su propia historia.
“Momento Sputnik”: Necesidad Urgente de Aprender y Enseñar Habilidades de Pensamiento Creativo
“El problema es que sólo existen mil doscientos millones de trabajos formales de tiempo completo en el mundo. Esto es una potencialmente devastadora escasez global de mil ochocientos millones de trabajos buenos. Quiere decir que el desempleo global para aquellos que buscan un buen trabajo formal con un sueldo por 30+ horas de trabajo continuo se acerca a un asombroso 50%.” Jim Clifton, The Coming Jobs War (20122, p.2)
En el libro That Used to be Us (Eso Eramos Antes), Friedman and Mandelbaum (2011) exponen que para que las organizaciones sobrevivan y los individuos prosperen, cada uno de nosotros tiene que aprovechar el poder de la imaginación y aumentar nuestra capacidad para la creatividad e innovación para poder entregar ese “extra” adicional, necesario. Podemos preparar mejor a los alumnos para ese futuro incierto a través de instrucción explicita sobre cuándo y cómo usar habilidades cognitivas que son las herramientas de uso diario de los innovadores y empresarios, para que puedan tomar su lugar en lo que Richard Florida (2014) llama “la clase creativa”. En el núcleo de la clase creativa están las personas cuya “principal función económica es la de crear nuevas ideas, nueva tecnología y nuevo contenido creativo.” Desarrollar este conjunto de habilidades es imperativo para el éxito en un mercado de trabajo que evoluciona y está devastadoramente escaso:
La Clase creativa la forman de la tercera parte a la mitad de toda la fuerza de trabajo en las naciones económicamente avanzadas de América del Norte, Europa y Asia. Representa alrededor de 40 millones de trabajos en los Estados Unidos.
Incluso cuando las habilidades tradicionales se están subcontratando al extranjero (outsourcing) o volviéndose obsoletas por la automatización, la creatividad e innovación es mercancía muy demandada.
Las escasas oportunidades actuales para capacitarse y entrenarse en estas habilidades contribuyen a la brecha económica cada vez más grande –la diferencia entre obtener un trabajo bien pagado con oportunidades de ascenso y un trabajo de sueldo mínimo.
Subrayando la necesidad crítica para darle el poder a esta generación con las habilidades de pensamiento creativas e innovadores que mejorarán sus oportunidades.
Una encuesta de Adobe Systems de 5000 personas de tres continentes reporta que el 80% ve el abrir el potencial creativo como crucial para el crecimiento económico. Pero sólo el 25% siente que está viviendo su potencial creativo.
Otra encuesta reciente de 1500 directores ejecutivos de IBM reporta que la creatividad es la aptitud más preciada entre los empleados y gerentes.
La creatividad en investigación- qué tan bien las personas generan ideas, qué tan originales son, y cómo recorren el camino que lleva de tener una idea a convertirla en una acción- ha mostrado una disminución constante en las habilidades relacionadas con creatividad e innovación en los pasados 20 años.
En estos tiempos donde las pequeñas y medianas empresas son las responsables de prácticamente toda la creación de nuevos trabajos, debemos de encontrar formas de fomentar el pensamiento innovador, así como la mentalidad emprendedora en la fuerza laboral, en los estudiantes; que son el futuro de la misma, y en los mismos empresarios. Como menciona Florida, “El potencial humano prospera en la era creativa. Para poder observarlo en su totalidad es necesario fomentar el talento de cada uno de los empleados y reconocerlos como una fuente de creatividad.
En 1957 la Unión Soviética lanzó el primer satélite construido por el hombre para que orbitara alrededor de la Tierra, marcando el inicio de la carrera espacial con Estados Unidos lo cual generó una década de ingeniería y exploración trascendental culminando en astronautas caminando sobre la luna. La crisis de creatividad actual debe ser nuestra llamada de atención para preparar a los alumnos a que sean los innovadores del mañana. Desafortunadamente los sistemas educativos y de entrenamiento de Estados Unidos, así como de otras naciones industrializadas se enfocan en desarrollar aptitudes analíticas y de memorización, las cuales son necesarios pero no suficientes para involucrar a las mentes jóvenes y prepararlas para ser exitosas en el mundo laboral. Para muchos de nosotros las capacidades creativas no son cultivadas e incluso pueden ser desalentadas en el proceso educativo. Un claro ejemplo es un estudio que descubrió que la mayoría de los niños pequeños tiene altos niveles de creatividad al iniciar la escuela, pero éstos declinan de manera constante a través de los años hasta volverse adultos, lo que llevó a uno de los investigadores a concluir que: “El comportamiento no-creativo se aprende.” El estudio indica que la creatividad ha declinado constantemente en los Estados Unidos desde 1990 en los aspectos clave. (Kim,2012).
Independientemente, estudios emergentes en los campos de la mente, el cerebro y la educación –y estudios de la creatividad- señalan que existe un sinnúmero de oportunidades para promover las capacidades creativas de los niños, así como para preparar a estudiantes y adultos con un conjunto de herramientas cognitivas y habilidades que optimicen su pensamiento innovador.
Despertando el Potencial Creativo del Cerebro
La palabra educación proviene del latín e-ducere que significa guiar o conducir. Las experiencias literalmente forman el cerebro, y los sistemas neuro-cognitivos que se asocian con el pensamiento creativo son maleables. Asimismo, la creatividad es relativamente independiente de los métodos de medición convencionales del potencial humano como el IQ. Estudios recientes están revocando el mito de que la creatividad es un regalo especial que sólo pocos poseen. La profunda implicación de este hallazgo es que la mayoría de nosotros tiene la capacidad de aprender a ser más creativo e innovador. Ahora es posible crear ambientes educativos y oportunidades en los salones de clase y en el ámbito laboral para fomentar el potencial creativo. En nuestro trabajo a través de Norte América, Europa y alrededor del mundo está claro que en esta era de hiper-conectividad innovadora, es esencial que cultivemos habilidades cognitivas para identificar oportunidades, creando, evaluando y aplicando nuevas ideas que generen valor agregado único y relevante. Necesitamos tener ambos; pensamiento innovador y espíritu emprendedor. Necesitamos mentes innovadoras.
Cada día estudiantes de todas las edades van a la escuela con sus cerebros sustentados por 87 a 100 billones de neuronas. Gracias a tecnologías como la resonancia magnética cerebral los científicos han comenzado a identificar los sistemas neuronales clave en el proceso creativo. La ciencia del conocimiento creativo está ampliando nuestra comprensión de las habilidades cognitivas que impulsan la creatividad. Al mismo tiempo, existen teorías útiles que pueden ser aplicadas para impulsar la creatividad y el pensamiento innovador.
Sternberg (1985; Sternberg & Lubart, 1995) describe tres habilidades clave que pueden ser transformadas para aumentar el pensamiento creativo. En esencia estas tres habilidades respaldan lo que conciben las mentes innovadoras en términos de pensamiento creativo y emprendedor.
Habilidad sintética que se refiere a la generación de ideas creativas y novedosas. Las personas con pensamiento sintético desarrollado son reconocidas como innovadoras ya que establecen conexiones que otros no reconocen.
Habilidad analítica referida al pensamiento crítico y habilidades para la resolución de problemas basados en la identificación y evaluación de posibles escenarios. El pensamiento analítico promueve la creatividad distinguiendo malas ideas y destacando las ideas prometedoras. Las mentes innovadoras se apoyan en el análisis para considerar todos los ángulos posibles de las ideas creativas y sus resultados potenciales.
Habilidad práctica para transformar las ideas en realidad. Los innovadores usan la capacidad práctica para tornar conceptos abstractos en concretos, demostrar su utilidad, e identificar a las personas que se beneficiarán más con su uso.
Diferentes estados mentales o formas de pensar pueden ser aplicados para optimizar la creatividad y el pensamiento innovador. Para algunos, estos estados pueden ser difíciles de obtener pero con el tiempo se pueden cultivar. Podemos entrenar a nuestros cerebros a ser más productivos creativamente y a proactivamente aplicar formas de pensar innovadoras a retos creativos (Carson, 2012).
Científicos que estudian el cerebro, han identificado dos redes neuronales implicadas en el pensamiento creativo, la de Atención Ejecutiva y la Condición Estándar. La Red Atención Ejecutiva conecta regiones periféricas del lóbulo frontal con áreas posteriores de la región del lóbulo parietal, está activa cuando se requiere control cognitivo en la implementación, resolución de problemas y evaluación requeridos en las fases de innovación. Por otro lado la Red de Condición Estándar también conocida como Red Imaginativa está involucrada en “la construcción de simulaciones dinámicas mentales basadas en experiencias pasadas, como por ejemplo cuando recordamos o pensamos en el futuro y en general cuando imaginamos situaciones o escenarios diferentes a las presentes” (Kaufman, 2013). Esta red implica áreas del lóbulo frontal, temporal y córtex parietal basándose en los recuerdos personales y en la memoria a largo plazo. Hay estudios que indican que ésta red se encuentra especialmente activa durante la lluvia de ideas y en las fases de libre asociación del pensamiento creativo. Conforme continúen los estudios de las áreas del cerebro que están más involucradas en el conocimiento creativo aprenderemos más acerca de cómo y cuándo acceder a estas redes neuronales para conseguir ideas innovadoras y más tarde evaluarlas e implementarlas.
Oportunidades de cambio
Para sobresalir en la economía innovadora global, los estudiantes de hoy necesitan pensamiento creativo y emprendedor y deben hacer todo lo posible para volverse personas que puedan colaborar, crear e implementar nuevas ideas que posean un valor agregado relevante.
Han de tener las habilidades para identificar problemas y oportunidades, idealizando y dialogando sobre posibles soluciones, construyendo y optimizando las mejores ideas, y finalmente aplicándolas y depurándolas en respuesta a comentarios recibidos. Todas estas habilidades se pueden enseñar y aprender. Los estudiantes tienen un gran potencial inherente para ser aún más creativos y para aprovechar al máximo sus habilidades creativas, analíticas y prácticas. La pregunta es si tenemos la voluntad o el deseo de aprovechar esta área de oportunidades y de ayudar a cultivar las mentes innovadoras que los estudiantes necesitan para el futuro.
*Outsourcing: obtener bienes o servicios de un proveedor externo o del extranjero, sobre todo en lugar de una fuente interna.
** Story Scape: Algo así como Scape de la Historia, scape en vez de Escape.